En el proceso de transformación digital que impulsa la Universidad de Aysén será clave la participación de la comunidad universitaria.
Potenciar el valor de la tecnología en todas sus áreas, a través del proceso de transformación digital, es una prioridad de la Universidad de Aysén. Se trata de promover e implementar cambios en distintos procesos que, mediante el uso de tecnologías, ayudan a cumplir los objetivos estratégicos de la institución.
Para el éxito de esta iniciativa resulta imprescindible la participación de la comunidad universitaria, dado que contempla un cambio cultural en toda la casa de estudios. De este modo será posible definir un plan de trabajo en ámbitos prioritarios para mejorar la calidad de los sistemas y servicios tecnológicos, la gestión del cambio y la digitalización y automatización de los procesos. Asimismo, permitirá identificar nuevas necesidades de nuestro entorno, para mantener una oferta académica competitiva en el actual contexto de transformación digital.
Este proceso es liderado por la Dirección de Planificación y Aseguramiento de la Calidad en el marco del trabajo colaborativo con REUNA,
“Desde la Dirección de Planificación y Aseguramiento de la Calidad (DPAC), encabezamos un proceso crucial para el futuro de nuestra universidad. Nos proponemos impulsar la formulación y concreción de nuevos proyectos que no solo enriquezcan el presente, sino que también contribuyan al desarrollo a largo plazo de nuestra institución.
Es imperativo reconocer la necesidad de abordar una estrategia de modernización y transformación organizacional. Nos alineamos con la ley de transformación digital, pero más allá de los sistemas tecnológicos, entendemos que como universidad, debemos definir un plan que trascienda. Es necesario abordar la gestión del cambio junto con las personas, buscando mejorar e implementar procesos más eficientes. Esta transformación está alineada de manera significativa con nuestras áreas fundamentales: docencia, investigación y vinculación con el medio. Es el momento de unirnos en esta iniciativa, entendiendo que esta transformación no solo impactará en la infraestructura y los procesos, sino que también moldeará la experiencia de todos los miembros de nuestra comunidad universitaria.”
Medición de la madurez digital
Con el fin de definir los proyectos que se ejecutarán a mediano y largo plazo, el plan inicial de este proceso incluye desarrollar un trabajo con foco en las personas que integran la universidad, que permitirá identificar las nuevas necesidades que ha generado la era digital. Por ello, un primer paso, será medir la madurez digital, proceso que están realizando diversas instituciones en el ámbito educativo y que busca determinar el nivel de avance de la transformación digital en áreas como la satisfacción de las personas frente a sistemas y servicios tecnológicos, digitalización y automatización de procesos clave, conocimiento de la estrategia de transformación digital y las capacidades necesarias para la incorporación exitosa de nuevas tecnologías.
Entre el lunes 15 y el viernes 27 de enero, la consultora IDC aplicará en nuestra casa de estudios la Encuesta de Madurez Digital (EMD), instrumento que busca conocer y analizar la situación actual identificando las principales brechas para implementar iniciativas que las mitiguen. Esta consultora ha sido seleccionada gracias al trabajo de un conjunto de universidades en el marco del Comité de Transformación Digital de REUNA, que se encuentran colaborando para llevar adelante un proceso participativo para apoyar a las universidades.
Según destaca Paola Arellano, Directora de REUNA, “que el plan de mediano y largo plazo se realice sobre la base de medir la madurez digital desde la experiencia de las y los trabajadores de la universidad, muestra la relevancia de la gestión del cambio y el trabajo constante con las personas en este tipo de transformaciones, condición necesaria para el éxito”.